Prólogo a la edición de Óscar Valcárcel.



No he tocado ni una palabra, sólo he cambiado mi nombre por Óscar.
Esto, ahora, es vuestro prólogo. De rodillas: gracias.



Si no recuerdo mal nos conocimos una noche de verano en el club, tomando cervecitas (para no variar) pense quien seria ese chico tan serio... Jajaja, me equivocaba!!!! Pero de verdad el dia que recuerdo fue el dia que volvimos a ser amigos, celebrabas tu cumpleaños, y yo tras una epoca un poco mala de mi vida, me acople con todo el morro... jeejeje Alli, esa noche de copichuelas en el club, empezo mi vida de cero.


C.M.V.

Un pasito delante después del que venía detrás, así todos los días; Si hay un traspiés, el de detrás más rápido hacia delante, así de cero llegaste a cien. Sigue, hay muchos más números y te los mereces todos.




A Óscar le conocí una noche de verano en la antigua escuela de Cabañas donde íbamos por la noche a cenar, tomar algo o lo que fuese y esa noche estábamos allí los de siempre del pueblo y de repente entró por la puerta Capi y dos amigos, Yuyu y Alex, con unas ganas de fiesta increíbles, tanto fue así que cuando la gente se fue ellos querían más (y yo jeje) asi que nos fuimos con el coche a la solana, con la musiquita y la bebida y asi hasta casi el amanecer.
La verdad es que cada vez que venia era un fiestón lo que se organizaba, no importaba donde, en fiestas de pueblos, en la iglesia, en el empalme, en la solana, en donde fuese siempre que hubiese ron, coca cola y tabaco.
Que buenos ratos hemos pasado madre, eran días en lo que todo daba igual, solo había que pasarselo bien y olvidarse del resto.
Y un día conocí a Capi, en las fiestas de palazuelos metiendome una carta en el bolsillo de atrás del pantalón, esa noche terminamos en medio de la carretera del pueblo jeje! Parece ser que había algo más en ese Capi fiestero...


A.G.V.

Sol en 1.245 noches geniales , conjugadora innata de mi mal verbo e importante hito entre todas las baldositas que van tapizando el camino. Sol en mi libro y mi vida. Siempre.




Mucho hay q mirar atras xa remontarse a esos días tan buenos q hemos pasado y seguiremos pasando en Matalindo y Cabañas... Dnd fue? Pues xo no me acuerdo, vamos a dejarlo en medio, en la campa de la Iglesia. Templo Santos de chistes, borracheras, confidencias y resacas, a la luz de la luna y al amanecer.


A.A.B.

Amiga. El poquito que hace falta para sonreír, tiempo de soles 12 meses al año, el enchufe en que te recargas, la dignidad, buen hacer y constancia que todos deberíamos practicar. Una de las pocas, poquísimas, personas a las que quiero.






Lo que puedo decir en los pocos ratos que nos hemos visto, es que me has dado pequeñas muestras de una persona íntegra, escasas palabras de apoyo pero de las más importantes que me han podido dar. A favor tuya, me gusta tu sensatez cuando en circunstancias que se dieron, parecía que todo el mundo iba en contra de tu opinión, te mantuviste firme y creías lo que sentías y seguiste hasta el fin fiel a tus principios. Todos cometemos errores, pero tiene una forma muy especial de continuar y es lo que te hace muy grande!


R.D.M.

Préstame tu fuerza, seré invencible. Eres la maldición de los tristes. Sigue inspirándonos firmeza y dándonos lecciones de alegría. Tú hubieras hecho lo mismo.






No voy a mentir a cerca de cuando conocí a Óscar. La verdad es que pasó sin pena ni gloria. Era el hermano de una amiga y en cierto sentido parecía soso y distante, vamos, nadie con el que te irías a tomar unas cañas... (Ni se me pasaba por la cabeza lo equivocada que estaba...)
Supongo que el momento en el que realmente empecé a conocer a este "personaje" (él sabe que es desde el cariño), fue el viaje que hizo con su amigo Yuyu (otro personaje) a Sligo, Irlanda, para visitar a su hermana, con la que me encontraba disfrutando de un año de Erasmus de despiporre total. Y madre mía, ¡llegaron los 2 y llegó el Katrina! Creo que esa fue la primera de tantas andaduras que siguieron y en las que nos lo pasamos tan bien. Cada día era una aventurilla nueva en la que estaban aseguradas las risas y el desparrame.
Así que podríamos decir que Óscar es aquella persona a la que siempre me llevaría a tomar una caña por ahí, porque sabes que con él la fiesta está asegurada.


M.G.V.

Impenetrable coraza, exquisito interior tras romperla. Un corazón metido en un todoterreno, de esos para los que no hay caminos difíciles. Esas cañas están tardando!






No me acuerdo del día que conocí a Óscar. Supongo que un día cualquiera hace más de quince años en el colegio de toda la vida.
Sin embargo, sí me acuerdo del día en que nos enseñó una de sus poesías.
En nuestro punto de encuentro, por la noche, nos leyó varias.
Sabía que escribía bien, pero no tanto. Nos quedamos impresionados. Este libro, estoy segura, va a sorprendernos aún más.


I.C.G


La más dulce, tranquila y equilibrada alma. De esas amistades distantes que siempre merece la pena guardar en el zurrón porque sabes que estarán el día que las necesites.





Era un día cualquiera de tantos que bajaba al club. Allí, comenzamos a hablar, nuestro enemigo común nos unió. Durante muchos años hemos vivido hombro con hombro hablando todos los días, a todas horas, por el msn, por teléfono y sobre todo allí, en el club, nuestra guarida.


Hablábamos de todo, sin tapujos ni vergüenzas, tu me hablabas de ellas, yo te hablaba de ellos, te escuchaba, me escuchabas, seguía tus consejos y tu los míos, del curro, de los amigos, de lo que nos había pasado aquel día o simplemente permanecíamos callados disfrutando cada uno de nuestro silencio acompañado.


Tras la barra de aquel bar, juntos, vivimos innumerables historias desde “¡dime una palabra que te escribo algo!” en una servilleta, pasando por la anécdota del gafas o del cubo tv hasta el día que finalmente nos separamos.


M.M.O.


¡Lucero! No te caben condecoraciones en el pecho. Mantente firme, sea tormenta, tempestad o Dios vestido de marinero por su primera comunión: sigue siendo anea.





Mi Brewery favorita de Sligo, una mesa de madera y cuatro pintas bien tiradas en ella. No tardaron en llegar nuestras locas historias irlandesas, que escuchabas como si quisieras colarte en sus enredos y participar de ellos. Y así nos encontró la luna, cautivados por la magia de las palabras, las risas despreocupadas y por supuesto la mejor cerveza. Sin duda fue una perfecta tarde en mis amadas tierras irlandesas.


R.R.Z.


Mezcla de agua y vino, indisoluble e imprescindible. Un referente. La Luna en cada poema de Óscar Valcárcel, la que nunca me regaló su cara oculta… como buena Luna.






“I'm a lady!” he cheers as he laughs at himself and at you and at the situation in itself, as he listens thoughtfully to all you have to say and dearly, profoundly tries to comprehend, as he replies sarcastically, insultingly but wholeheartedly and truthfully always in one's aid. “I'm a lady!” he gasps, as he takes a sip of rum-coke and proceeds to ponder on why we ladies are as we are, in his male grotesque manner, yet cheerful, quirky and forgiveable way. “I'm a lady!” he declares as he reads eyes, faces and movements, so sure of his assessment, so difficultly swayed.
A truly infuriating sole who will never cease to state polemic arguments, who is strong in his opinion but would never hurt a fly, who is clearly veiled yet at heart true, caring and proud.


F.R.R.

Surely the one I later met among all of the friends gathered here, also, the one who gave me more vital thoughts and guided me, with her strong arm, through tons of feelings. Keep smiling, would you do that for a lady like me?





Se me mezclan las fechas, no puedo precisar el año en que nos conocimos. Fue a comienzos de verano, eso sí. Y fue en 2001 o 2002. Como suele pasar nos conocimos, por ser Óscar, amigo de un amigo, o más bien, hermano de la amiga de un amigo. Óscar y yo estudiamos en la misma universidad y nos habíamos visto alguna vez por los pasillos. A priori, ninguna característica destacable, chico serio (como yo) de esos que si le suenas de algo murmura por lo “bajini” una especie de “hhmmmla” que es un pseudo-saludo y expresión muy utilizada en señal de que, “me suena tu cara y no sé de qué pero por si acaso gesticulo algo” (como yo).


El paso del murmuro al “Hola” lo dimos una mañana de junio en la pradera de El Club Social de Molino de La Hoz, cuando me acerqué con la bici a un grupito de amiguetes entre los que conocía a mi amigo de toda la vida Borja. Entonces me invitaron a dejar la bici y a sentarme con ellos, no solía ir mucho con ese grupo porque estaba todo el día en la bici haciendo el tonto y me aburría estar sentado hablando de cosas.


Ya ni me acuerdo de qué hablamos, supongo que de las cosas de siempre “Tú eres de la Uni”, “¿Y que haces?” ”¿y qué tal te va?” .Y poco a poco, a medida que fue entrando el verano fui cogiendo el gustillo a sentarme con los colegas lo que propició nuestro acercamiento.


Una vez estrechados lazos, y por coincidencias de la vida, el destino nos unió más aun gracias a sendos – llamémosle- avatares de juventud, los cuales, afrontamos casi a la vez, en esa etapa fue cuando realmente descubrí que estaba delante de una persona extraordinaria y con la que podía contar para lo que fuera necesario. He compartido vivencias gratas e ingratas con Óscar y espero poder seguir haciéndolo durante muchos años.


Con los años, las obligaciones y nuestras diferentes aficiones, trabajos y demás compromisos por separado, nos han hecho tener periodos de acercamientos y distanciamientos, pero siempre que nos vemos, aunque hayan pasado semanas, tengo esa sensación que tiene uno con los viejos amigos de encontrarte con un amigo al que viste ayer.


E.P.V.

Si buscas AMIGO en google sale él. Es como un brazo para mí. Daría para escribirle un libro sólo a su cabeza: desbordante, ágil y siempre hilarante. Pocos le conocen de verdad; Yo espero que me deje seguir intentándolo: cada día.
De pedales, aquella primera conversación versó sobre pedales de bicicleta, compadre.






Yo recuerdo que te conocí en tu casa, estaba con tu hermana y coincidimos. Al principio fuiste el Hermano MAYOR de mi amiga, ya sabes se te miraba con admiración por la diferencia de edad. El tiempo fue pasando y nos fuimos conociendo un poco más, hasta que llego el día en el que aunque seguías siendo mayor, te convertiste en mi amigo y fuiste admirado más que por la diferencia de edad, por tu infinidad de conocimientos tu manera de ser y por muchas cosas que te describen como buena persona que eres(siendo sincero a ver si te encuentro una buena mujer que te quiera y lo tendrás todo, es lo que me inquieta, no por nada sino porque creo que las tías no saben lo que se pierden y en muchas ocasiones TU no les dejas ver el verdadero TU.), no recuerdo exactamente cuándo pero sé que desde entonces he contado con tu apoyo 100% y si de algo estoy seguro y no lo puedo decir de mucha gente, lo dejarías todo por ayudarme si de verdad lo necesitase. Eso mi amigo es lo que te honra y en mi opinión te hace único ante mis ojos.

A.C.C.


Por supuesto que lo dejaría todo por ayudarte, ten en cuenta que debes ser la última persona digna, trabajadora y sabia que queda. Tú, por mis chicas no te preocupes… ¡aunque griten!




Conocí a Capi por mi profesor de guitarra, no recuerdo si era verano o invierno, me cayó super bien y enseguida me sentí a gusto con él, igual que me sigo sintiendo.


M.S.J.

¡El hada chiquinina! Esta chica tiene la llave de todos los bares y la de mi admiración. Churretes de risa y buen consejo: siempre.








Aunque tarde y con delirio febril, creo que la primera vez que nos vimos fue gracias a Drake y a sus multiples escapadas a Cabañas, acabando siempre en mi casa. Pero creo, y no me equivoco, los de cabañas conocimos y descubrimos, un nuevo fichaje el verano en que Óscar era, segun nosotros el clon de Fernando Redondo y ahora con el paso de los años y "las vivencias" le redescubrimos como escritor.


C.A.B.


Llegaste tú, se acabó lo vano y comenzó el arte: plástico, dialéctico o vital. Eres de los míos, por eso te respeto, nadie nos conocerá nunca, aunque nos dejemos los huevos para que, mientras lo intentan, estén a gusto.









Era una noche tranquila donde muchos de nosotros los llamados “molineros” estábamos tranquilamente tomando cubalibres en la míticas escaleras del club, debajo del cartel “Bar Tina”. Corría una ligera brisa, cuando de repente a lo lejos una mancha negra y borrosa se acercaba rápidamente hacia nosotros, y ZAAAAAAAASSSSS!!!!!!! Tremendo trompaco delante de nuestras narices de nuestro amigo Óscar. Bajo del coche y con una inigualable forma de caminar se acerco a mí. Yo, entumecido por su gran hazaña me tendió su mano derecha y me dijo: Hola, ¿Que tal? Soy Óscar, alias el Capi


S.P.G.


Veleta certera, cambiante sí, pero veleta que apunta siempre a un viento: el de su felicidad. ¡“Tol” amigo ahí!






Creo que cuando te conocí fue en las calles nuevas de botellón a escondidas después de dejar a tu por aquel entonces novia en casa, pero quedaría mucho mejor la segunda o tercera vez que fue cuando atasqué el coche en el barro y tu apareciste con el suzuki, fue hacer una llamada y en seguida apareciste cual salvador a arrimar el hombro, lo cual demuestra en parte tu caracter, ayudar sin dudarlo un momento a los colegas y más aún si eso puede acarrear algo de emoción. Por supuesto el coche salió del barrizal en el que se había metido


Si quieres que hable de nuestra homosexualidad no tengo problemas


R.J.B.


Hablemos de coherencia y principios, de solidez y fuerza. Si lo prefieres hablamos de convicciones y trabajo... o de amistad y lucha, genialidad y arte… ¡bah! Si todo eso ya lo sé de ti amigo. ¡Dejemos de hablar y bebamos! ¡Nadie, aparte de nosotros, sabrá nunca lo que pasa cuando te disfrazas de jefe de estación!





Conocí a Capi desbrozando vulvas a contrapelo en un monasterio Jesuita, levanté la vista y le vi comiendo ojete de novicia, le pregunté:
- ¿Ojete o pepitilla?
-Lo que más a mano me pilla.


J.S.L.

Decía el marqués de Matalevosa que todas las muchachas le parecían hermosas; Mas, recostado tras la ingesta, sólo algunas se la tornaban iniesta. Preocupado por tal displicencia orgánica resolvió llamar a D. Chimo, conde-duque de Villalbilla y metérsela hasta la campanilla.




Conocí a Capi allá por el otoño de 2007, leí alguna cosilla suya y me enamoré perdidamente de su lado femenino y de esos dos cojones peludos que le cuelgan. Pensé en pedirle matrimonio e irnos al campo a plantar calabazas, pero como a los ateos no nos permiten plantar calabazas, le propuse escribir un libro a cuatro manos y diez cubatas, para desgracia de todos ustedes. Y ustedes, bienvenidas. Ya pueden empezar a tirarnos bragas y sujetadores


M.E.M-A. (Illo! No veas si molan tus iniciales! xD)

Gran aporte en mi vida, como cuando me compré el Windows XP. Compadre y referencia en esto del ir tirando sin tetas fijas. El gachó es un bribón, mezcla de poeta y buena persona.
¡Tiren!, ¡Tiren bragas y sujetadores, que tenemos que renovar el fondo de armario!




Una tarde en el club, yo te puse una copa de pacharan y te pregunte ¿ Como te llamas amigo? entonces comenzo la amistad. Por cierto: Estabas guapete, delgado, sin barba,y todo sudado porq venias de dar un paseo.


M.B.I.

La pizquita de alegría, el zarzal de corazones, confidente de tantas y tantas correrías . Amiga desde aquel pacharán, ventrículo al compás hasta que dejemos de latirnos.
Tú hace 7 años también estabas buena, pájara. Y sudar, sudaba, pero no, no venía de un paseo. ¿Cuándo me has visto pasear, por el amor de Dios?




Creo que fue por el 2007 más o menos, cuando empecé a intercambiar alguna que otra frase, supongo que también chorradas y desvaríos varios, a través de Internet contigo.


Un día como otro cualquiera, si no recuerdo mal, un viernes, decidimos quedar, por aquello de ponernos cara… La idea principal era quedar sobre las 6 para tomar algo y a casita, que tú tenias cumple…pues dicho…y no hecho…creo que se nos alargó un poco más esa cervecita de las 6 de la tarde…


Debe ser que nos caímos bien, porque desde entonces hasta ahora, seguimos quedando de vez en cuando para ir a algún concierto o cualquier otro plan que surja…Por no hablar de las charlas vía Internet, que cuando nos ponemos en plan, telita…


Lo que tengo claro a día de hoy, después de todo este tiempo compartido contigo es, que como amigo y como persona, NO TIENES PRECIO.


V.G.L.

¡Cuidado con ella! Rugosa y dura, como las frutas verdes; Primero hay que quitarle la piel, comerse la carne y llegar al corazón, que lo tiene, lo juro. Mi directora de proyecto de fin de carrera como persona.
40 media, 65 una hora. Precio tengo, otra cosa es que a ti, al ser rockera, no te cobre.





Por mas que me estruje la cabeza,no recuerdo cuando nos conocimos,eres de los que siempre estuvo ahí,vagamente,desde el cole.pero esa "vagueria"paso a presencia casi absoluta en reuniones,fiestas y buenos ratos...mas tarde tambien en los malos(si hacia falta),en confidencias(las justas)y que se yo!
Y lo que nos queda amigo....


S.G.A.

¿Qué te voy a decir yo a ti?, si nos conocemos desde que el mar muerto estaba enfermo. ¿Te lo digo? ¿Quieres que te lo diga? ¿Seguro? Te lo digo: ¡Te quiero más que comer con las manos!





¿Que cómo conocí a Osquitar? (porque para mí sigue siendo Osquitar). Pues en realidad no recuerdo una fecha ni un momento en concreto. Recuerdo una sensación…la sensación que me produjo el enterarme que dos hermanos madrileños tenían una casa en Matalindo… Un sentimiento de alivio, de respiro, de alegría, de tranquilidad… ¡¡Por fin unas personas que nos entenderían y con las que podríamos hablar del surrealismo (llamémoslo así) de la vida en Cabañas!!, y así fue.


Osquitar conectó muy bien con Silvia desde el primer momento, al igual que yo, pero tal vez por su edad (siendo los dos de la misma “quinta”), por sus gustos musicales (siempre “emocionados” al oír Héroes del Silencio), o llámalo “x”, pronto se hicieron amigos, confidentes y mucho más.
Mi relación con él nunca fue tan cercana, pero esa sensación de confianza y de tranquilidad que me transmitía, era la misma.


Recuerdo imágenes, momentos (siempre divertidos), porque por muy "difícil" que sea la vida en los Juarros ha habido momentos que no cambiaría nunca, incluso me atrevería a decir que la mayoría de ellos….me quedo con eso, prefiero quedarme con eso.


Apoyo incondicional, palabras de aliento, comprensión, alegría,… en definitiva “muleta” en la que apoyarme…. Eso es y ha sido Osquitar para mí.


Y aunque nos veamos de año en año (literalmente), hoy en día, y habiendo superado la barrera de los treinta, tengo esa misma sensación que el primer día : ¿Quién va este fin de semana al pueblo? Osquitar,…Uff!!, menos mal (pienso)… Porque sin ti (y ahora si que hablo en primera persona) no hubiese sido lo mismo, no es lo mismo. Gracias por habernos hecho todo mas fácil.
Siempre has sido, serás y seguirás siendo OSQUITAR.


La bala perdida, que nunca se perdió: sabía bien el camino, sólo estaba viviendo. Ni una puntada sin hilo y ni una pregunta sin saber la respuesta. ¡Espero seguir viéndote muchos años más! Confesora a tiempo parcial, corazón a tiempo completo.