martes, 27 de mayo de 2008

Experiencia

En la última cerveza del último bar
me propuso no decirme su nombre,
se pasó la lengua por los labios
y fui de todo menos hombre.

Metió su mano bajo mi camisa.
Ochenta y dos guantes blancos para
Ella y sus cuarenta ladrones,
yo soy solo un raterillo.


Después de quitarme el corazón
venía lo único importante:
"¿cuándo me quitas el calzón?"
"Espera muñeco, estás muy elegante"

Creía que lo tenía todo controlado,
algo normal en un colchón de un solo lado.
Ella, Directora Comercial de una cama sin fronteras,
yo soy solo un becario de tercera.


Con sus ojazos,
algún autor pestiño podría
escribir un par de tomos
de edulcorados poemas.

Yo prefiero mirarlos de cerca
mientras follamos alegremente.
Ella es Teniente General del orgasmo fingido,
yo soy solo un insurgente.



Arkaninger Feizas. Mayo de 2008

3 comentarios:

Óscar Valcárcel dijo...

Viva la insurgencia! Y la madre que te parió!

Qué grande eres coño!

Yo creo que ya tenemos poema para abrir el libro..

moshquis dijo...

Si que mola si...La verdad que todo el poemario. Unos mas que otros. Os está quedando "niquelao"
Beeeeeesos a los 2

Anónimo dijo...

Seguid así

Ambos dos ;)